EVITAR LA POLARIZACION.

Hace tres años se discutía este tema en relación al nombramiento del que habría de suceder a Juan Ramón de la Fuente como rector de la UNAM. Le encuentro aplicación a la situación actual en la UABC.  Un buen ejercicio es leerlo cambiando las siglas "UNAM" por las de "UABC" y donde diga "Nacional Autónoma de México", leer "Autónoma de Baja California".   Evitar la polarización en la UNAM Carlos Reyes cra19762003@yahoo.com.mx La polarización, el antagonismo entre los distintos grupos que avalan a los candidatos a ocupar la rectoría no es sano para la Universidad Nacional Autónoma de México ni para el proceso de auscultación de la Junta de Gobierno. No es con la confrontación o las críticas gratuitas y sin fundamento como debe desarrollarse la sucesión. Ahora es cuando la Universidad Nacional tiene que demostrar que es un espacio para la diversidad, la pluralidad y el disentimiento. Es momento para que dé cabida a todas las voces, sin importar que éstas representen apenas una minoría en el interior de la institución. La inclusión de los candidatos a rector en el proceso de auscultación representa diferentes posturas, distintas maneras de entender a la universidad y no deben demeritarse ni minimizarse. De acuerdo con la comunidad universitaria, lo más valioso en este momento en el proceso de selección de rector que ha iniciado la Junta de Gobierno se relaciona con el respeto a las distintas posturas ideológicas, académicas e, incluso, políticas que van a coincidir en los próximos días. No se trata de una pasarela política en la cual se mide la popularidad de tal o cual candidato a suceder a Juan Ramón de la Fuente. El asunto es menos banal, mucho más comprometido con el devenir y la historia que encarna la UNAM. No es una competencia donde se midan fuerzas, sino un momento en el cual se deben confrontar y comparar los proyectos de cada uno de quienes aspiran a tan complicado cargo. La Junta de Gobierno, dicen los entrevistados, debe tejer fino. Capacidad de decisión oportuna e incuestionable la tiene, de eso no tienen duda. Lo que sí advierten es que el proceso de selección debe operarse alejado de estas deformaciones políticas que romperían la estabilidad de la dinámica sucesoria. Ajeno a actitudes extremas. Universitarios consultados así opinan. Víctor Manuel Castaño Meneses, director del Centro de Física Aplicada y Tecnología Avanzada de la UNAM, enfatiza que las actitudes extremas de los grupos que apoyan a cada uno de los candidatos a ocupar la rectoría se pueden convertir en un factor de riesgo para el proceso de sucesión. A decir del científico, la polarización que pueda generarse en los próximos días “debilitaría” a la Universidad Nacional y afectaría la calidad de la sucesión, por lo cual debe ponerse hincapié en este aspecto. “La injerencia de elementos externos a la universidad, más allá del genuino interés que para la sociedad tiene la máxima casa de estudios del país y la polarización irracional de algunos sectores internos, son factores que pueden alterar el desarrollo armónico del proceso”, explica. Castaño Meneses apunta que, desde esa óptica y dándole la importancia que requiere el cambio de poder en la UNAM, los dos criterios fundamentales para la decisión de quién será el próximo rector son, en primer término, la historia personal de los candidatos y, en segundo, sus proyectos de desarrollo institucionales. No es, por ningún motivo, un proceso que deba seguir la inercia que lleva una campaña política porque no se trata de medir fuerzas en el terreno de la imagen, sino de los proyectos académicos que mejor convengan a la institución. “No se trata de una pasarela de popularidad o un ejercicio de ‘democracia’, sino de decidir quién es el mejor para la UNAM. Dicho sea esto, me parece que la universidad cuenta con los mecanismos institucionales para elegir a la mejor gente, por lo que el ingrediente fundamental para este proceso debe ser el respeto absoluto, dentro y fuera de la UNAM, a nuestra legislación y hacia la Junta de Gobierno”, expresa. Por su parte, Judith Zubieta García, secretaria de Innovación Educativa de la Coordinación de Universidad Abierta y a Distancia de la Universidad Nacional Autónoma de México, señala que la transparencia y equidad del proceso, así como la sana competencia entre todas las opciones, dependen en gran medida del respeto que se dé a todas las expresiones ahí reunidas. La investigadora sostiene que se debe reflejar que se trata de un proceso de auscultación en el que se expresen las diversas corrientes de pensamiento, las cuales son el fundamento de una universidad moderna y en constante transformación. “Es mucho más conveniente que un proceso de aglutinamiento de fuerzas en el que pudiera verse clausurada o cancelada la posibilidad de expresión de algunos sectores o espacios del pensamiento universitario”, advierte. En tanto, José Luis Palacio Prieto, ex director del Instituto de Geografía de la UNAM, coincide en que el proceso tiene que decidirse, más allá de cualquier expresión de apoyo o desacuerdo, en función de un proceso participativo, como queda de manifiesto en los varios miembros de la comunidad que manifiestan su intención de ser designados al cargo. “En una institución de las dimensiones y diversidad académica, es lógico que esto suceda. Seguramente cada candidato contribuye a enriquecer el proceso con sus propuestas y éstas son fuente para definir el camino a seguir de quien finalmente es designado”, enfatiza Palacio Prieto. En ese sentido, comenta, todas las expresiones y propuestas que se presenten deben mantenerse hasta el final del proceso, pues debe ser la Junta de Gobierno la que decida, más allá de cualquier descarte, cuáles son viables y cuáles continúan con posibilidades de llegar a la rectoría. “En el transcurso del proceso, la solidez de los proyectos y el respaldo de las comunidades a las propuestas, me parece, constituyen elementos de decantación natural que la Junta de Gobierno ha sabido discernir para identificar a los candidatos con mayor potencial y cualidades”, apunta. La Junta y la comunidad El director del Centro de Física Aplicada y Tecnología Avanzada de la UNAM, Víctor Manuel Castaño Meneses, afirma que la Junta de Gobierno debe estar por encima de cualquier veleidad, pues la comunidad académica está atenta al proceso y tiene un compromiso con la institución que la Junta no debe soslayar ni debe arriesgarse a hacerlo. “La mayoría de los académicos de la UNAM son personas muy comprometidas con la institución y conscientes de su responsabilidad como universitarios, resulta extremadamente difícil pasar por encima de miles de profesores universitarios atentos al proceso”, puntualiza. Por ello, agrega, quienes conforman la Junta de Gobierno, amén de poseer intachables credenciales académicas y morales, representan muy diferentes posiciones ideológicas que garantizan la pluralidad. En estas condiciones, “las ‘manipulaciones’ se convierten en una leyenda urbana más”. Para Judith Zubieta García, secretaria de Innovación Educativa de la Coordinación de Universidad Abierta y a Distancia de la Universidad Nacional Autónoma de México, coincide en el hecho de que la manera más clara para que se desarrolle este proceso es que la comunidad universitaria, en forma libre, exprese sus ideas, posturas y reflexiones sobre los diversos candidatos y sus programas de trabajo. La armonía del proceso depende, en principio, del interés de todos los candidatos por mantener una universidad “unida y vigorosa”, pero también de la capacidad de autocrítica de los académicos universitarios. Al respecto, José Luis Palacio Prieto apunta que los miembros de la Junta de Gobierno son reconocidos académicos cuyo compromiso con la institución y su mandato no puede cuestionarse en modo alguno. “Poseen todos ellos un amplio conocimiento sobre las necesidades de la institución y del país en materia educativa y académica en general y cuentan igualmente con la sensibilidad, individual y colegiada, para reconocer cualidades de liderazgo y sensibilidad política, no sólo académica, indispensables en un candidato o candidata a ocupar tan elevada responsabilidad”, finaliza. campusmilenio.com.mx   /   derechos reservados 2007