LA UABC, UNA DE LAS MEJORES UNIVERSIDADES DE MÉXICO

Por Juan Manuel Ocegueda Hernández.

La efervescencia política que genera el proceso de cambio de rector en la Universidad Autónoma de Baja California, ha llevado a que grupos de universitarios se expresen públicamente planteando sus ideas, opiniones y críticas en torno al trabajo realizado por la administración saliente encabezada por el Dr. Gabriel Estrella Valenzuela. De pasadita, algunos han aprovechado para hacer análisis retrospectivo echándole un vistazo a la obra del Dr. Alejandro Mungaray Lagarda, en ciertos casos con buena fe y afán constructivo reivindicando la actitud crítica que debe caracterizar a todo universitario, en otros, con no tan buena fe y con un claro espíritu destructivo.

El desarrollo institucional es un proceso dinámico, fruto de decisiones que a veces son acertadas y otras veces no lo son, pero en donde lo importante es aprender de los errores que se cometen para mejorar. No tengo duda de que las decisiones de las autoridades universitarias deben estar sujetas a la crítica y a la evaluación permanente, pues ello permite identificar lo que funciona y lo que no funciona y, si fuese el caso, establecer las acciones correctivas necesarias para promover la mejora continua. No obstante, el que se reconozca que existen áreas de oportunidad para mejorar, no implica el fracaso del modelo de universidad, ni tampoco es sustento suficiente para descalificar de manera sistemática la obra de una administración. Es importante que las posiciones de quienes debaten se sustenten con argumentos y evidencias objetivas, pues de otra manera se corre el riesgo de confundir una percepción individual con el sentir colectivo o una situación particular con una realidad generalizada.

En lo personal estoy convencido de que la UABC, aun con las deficiencias y limitaciones que se puedan señalar, es una de las mejores universidades de este país, lo sostuve en las presentaciones que hicimos los candidatos a rector en los distintos campi universitarios, del 16 al 19 de noviembre del presente, y lo sostengo actualmente porque tengo elementos suficientes para pensar así.

Existen muchas maneras para evaluar el desempeño de una universidad, pero cualquiera que ésta sea es importante establecer referentes, pues una cifra asociada con un indicador o un hecho, por sí misma no dice mucho si no se considera un punto de comparación. Hay diversos enfoques analíticos, por ejemplo, se puede tomar un indicador y examinar su evolución en el tiempo, con lo cual se contrasta lo realizado por distintas administraciones en una misma institución. Otra manera es seleccionar el indicador y un periodo, luego hacer una comparación entre instituciones similares como pueden ser, en el caso que nos ocupa, las universidades públicas estatales de México (UPE). En el análisis que sigue se adopta el segundo enfoque.

El primer indicador que se presenta es el esfuerzo de cobertura realizado por las UPE en el periodo 2002-2009, no se incluye 2010 debido a que la información no está disponible para la mayoría de las universidades. De acuerdo con el gráfico siguiente, la UABC es la institución que registró el incremento mayor en la matrícula de TSU y licenciatura, aun por encima de universidades más grandes como la Universidad de Guadalajara, la Universidad Autónoma de Nuevo León y la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Esta es una gran contribución de la UABC al desarrollo de Baja California y de México, que debe destacarse y mantenerse si aspiramos a ser un país de altos ingresos y con una mejor distribución de la riqueza. Experiencias exitosas de desarrollo económico como las de Corea del Sur y Chile, ilustran la importancia de extender los beneficios sociales de la educación superior.

Fuente: Elaboración propia con datos tomados de la Secretaría de Educación Pública, www.dgesu.ses.sep.gob.mx/Principal/

Desde luego que aumentar la cobertura no es suficiente, si ello no se acompaña con medidas que garanticen una buena calidad de los servicios educativos que se ofrecen, pues sólo en esa medida los egresados tendrán una verdadera oportunidad de incorporarse exitosamente a la vida laboral y en sociedad. Surge entonces el problema de cómo medir la calidad educativa, sobre todo si se toma en cuenta que se trata de un concepto que engloba aspectos cualitativos que no siempre son factibles de medir. Una opción es recurrir a los trabajos que realizan algunas empresas privadas no educativas cuyo principal objetivo es informar y orientar a la sociedad, sobre todo a los jóvenes, en la toma de decisiones sobre dónde estudiar y qué carreras elegir. La empresa Reader’s Digest viene publicando desde 2003 la revista Guía Universitaria en donde cada año da a conocer el ranking de las 100 mejores universidades de México, en base a una metodología que considera la opinión de alumnos, maestros, egresados y empleadores, además de algunos indicadores de desempeño e infraestructura. En 2009 dicha empresa ubicó a la UABC en la tercera posición entre las universidades públicas estatales de todo el país y en la primera posición dentro de la región Pacífico considerando a todas las instituciones de educación superior, públicas y privadas, que operan en Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa y Nayarit.

10 MEJORES UNIVERSIDADES PÚBLICAS ESTATALES EN 2009

1	Universidad de Guadalajara
2	Universidad Autónoma de Nuevo León
3	Universidad Autónoma de Baja California
4	Universidad Autónoma de Querétaro
5	Universidad de Guanajuato
6	Universidad Veracruzana
7	Benemérita Universidad Autónoma de Puebla
8	Universidad Autónoma de San Luis Potosí
9	Universidad Autónoma de Yucatán
10	Universidad Autónoma del Estado de Morelos

                                   Fuente: Revista Guía Universitaria de Reader’s Digest, 2009.

10 MEJORES INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR

EN LA REGIÓN PACÍFICO, 2009

1	Universidad Autónoma de Baja California
2	Universidad Autónoma de Sinaloa
3	Centro de Enseñanza Técnica y Superior
4	Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey
5	Instituto Tecnológico de Sonora
6	Universidad del Valle de México
7	Universidad de Sonora
8	Universidad La Salle
9	Universidad de Occidente
10	Universidad Iberoamericana

                                   Fuente: Revista Guía Universitaria de Reader’s Digest, 2009.

Otra alternativa para evaluar el desempeño de la UABC con respecto a sus similares, las UPE, es comparando los montos recibidos por subsidio federal extraordinario proveniente de fondos concursables, cuya asignación está sujeta a la presentación de proyectos, al cumplimiento de las metas comprometidas con los fondos otorgados en años previos y al comportamiento de los indicadores institucionales. Dos fondos representativos de esta manera de asignar recursos son los del Programa Integral de Fortalecimiento Institucional (PIFI) y Modelo de Asignación Adicional al Subsidio Ordinario (MAASO), este último tiene una ventaja como indicador de desempeño pues se distribuye considerando la fórmula CUPIA que toma en cuenta un conjunto de aspectos relacionados con cobertura y calidad.  En ambos casos se puede observar que la UABC se posiciona en los primeros lugares, quinto lugar en la distribución de recursos PIFI y cuarto en la del fondo MAASO.

Las comparaciones anteriores representan un esfuerzo que busca contribuir al debate actual en torno a la situación real que guarda nuestra universidad, aportando datos y evidencias que la contextualizan en el escenario nacional. Este tipo de análisis tiene la ventaja, como ya se dijo anteriormente, de establecer referentes que le dan objetividad a la crítica. Existen muchos otros indicadores de desempeño en donde la UABC se posiciona favorablemente cuando se le compara con las UPE, pero por razones de espacio las abordaré en colaboraciones futuras.